Si el objetivo es dilucidar la posibilidad que cualquiera puede tener para convertirse en un líder, sea de un emprendimiento, proyecto, empresa o equipo de trabajo, lo ideal es poder dominar primero el significado de semejante palabra.
La mejor forma de conseguir echar luz sobre tal cuestión, es a través de especialistas, de líderes que han logrado alcanzar ese estatus con caminos diferentes, pero que, en fin, pueden dar cuenta de igual manera de lo que hace falta para convertirse en líder, pero no desde el título, sino en las acciones concretas.
“La cuestión más importante para conformar un emprendimiento y liderarlo, es rodearse con personas de características complementarias. Además, un líder debe ser una persona resiliente, que esté predispuesto a aprender todo el tiempo, es necesario que sea eficiente, pero que pueda cambiar un pensamiento, no quedarse cerrado en su idea”, analiza desde San Juan, Puerto Rico, Fabiany Lima, una emprendedora serial, como ella misma se reconoce, especialista en Startups, fundadora de tres de ellas.
Fabiany es originalmente nacida en Brasil, pero sus emprendimientos y esa capacidad de liderazgo que ostenta, la han llevado a recorrer el continente. Actualmente se desempeña como Directora de Dilimatch, compañía que se dedica a otorgar servicio de consultoría a Startups que buscan inversiones. Su visión de la composición de un líder, continúa con otra condición fundamental de rol: “Debe poder y saber cuándo pedir ayuda, apoyarse en personas de más experiencia. Es decir, no quedarse atado a su propia sabiduría”.
Quien aporta en este caso un poco de guía, es Lorena Almaraz, quien en México se ha dado a conocer como la “Coach de México”. Ese mote lo consiguió con mucha tenacidad, la misma que hoy le permite ofrecer su coaching, tanto a emprendedores que inician su camino, como empresarios ya posicionados también, con muy buenos resultados.
“Lo primordial que tiene que tener un líder es la capacidad de reconocerse a sí mismo. Tomar el liderazgo como uno mismo, sin confundir el ser líder con ser patrón, jefe o dueño, porque si no se pierde la percepción. Lo digo desde mi experiencia, porque creía ser una líder y no lo era, entonces es ahí donde busque transformarme”, explica Lorena, para luego agregar: “Si algo no funcionó en el desarrollo del proyecto, antes de ver en que fallaron los demás, un líder debe ver y analizar en que falló el, porque no logró quizás comunicar mejor su mensaje”.
De la mano de lo que destacaba Lorena en su última cita, Fabiany también entiende que la comunicación juega un papel fundamental en la capacidad que una persona tendrá para liderar un proyecto y así lo pone en palabras: “Creo que para nada en la vida existe una formula, pero para ser un buen líder, lo mejor es comunicarse de buena manera, ser una persona abierta, mostrarse cercano. Todos son personas y el líder tiene que motivar a su equipo, transmitir de la mejor manera posible la visión tiene del negocio. El líder que valore su equipo, seguro tendrá más chances de tener éxito”.
Lorena, amplía también su declaración anterior y apunta a lo mismo, a la comunicación como el gran valor que debe perfeccionar un líder: “Comunicación asertiva, ahí está la clave. Es fundamental que un líder trabaje su manera de comunicar, porque desde allí se transmite la esencia y el modo de liderar”.
Una de las grandes preguntas que se plantean cuando se habla de liderar un emprendimiento o compañía. ¿Será que cualquiera puede estar a la altura del desafío?, Lorena recoge el guante y comenta: “Yo creo que todos somos líderes de nuestras propias vidas, pero sucede que muchas veces se inventa que ser líder está atado a usar traje, tener un puesto alto y un cierto estatus o nivel. Sin embargo, líderes hay muchas veces en espacios que no son reconocidos, como puede ser una ama de casa, mi mamá, por ejemplo, que siempre nos lideró como familia”.
Aunque yendo más a lo concreto, en un contexto de desarrollo de negocios, vuelve a destacar la comunicación y esboza: “Desde el momento que asumimos que podemos comunicar una idea, dirigir, orientar a otros, podemos desarrollar el liderazgo. Algunos traen esas habilidades sociales y de comunicación más desarrolladas, porque las traen consigo de forma natural. Otros les tocará pulirlas, para alcanzar el objetivo”.
La experta brasileña, que además de emprendedora, es miembro de la junta de FEA Angels, un grupo de Venture Capitals, coincide en parte con la Coach oriunda de Tijuana, pero detalla: “Hay mucho que se puede aprender y mejorar, pero la persona que lidera, generalmente tiene condiciones que trae de manera natural. Es una persona que demuestra tener ganas, que no duda mucho, tiene facilidad para relacionarse y trabajar con otros. Son características que resultan difíciles de aprender porque son de un orden más personal y que a la vez marcan la diferencia. Si hay alguien que no logra motivarse solo, no puede controlar su ego, ni aprender de otros, será difícil logre liderar un emprendimiento con éxito”.
Más allá de lo mencionado como esencial, hay muchas otras características que se evalúan en la capacidad de una persona para transformarse en líder. “Un líder tiene que aprender, porque luego le tocará enseñar, sin embargo, hay que entender que los procesos no son instantáneos y la sabiduría se adquiere con el tiempo y la experiencia”, dice Fabiany, que también se explaya: “No existe tal cosa como la magia de la persona que todo lo puede, sino que siempre es bueno, como decía antes, rodearse de 2 o 3 personas de confianza, que complementen el rol de líder. Que compartan la visión y la voluntad de trabajar, porque iniciar un emprendimiento o una empresa, es realmente mucho trabajo”
Por su parte, Lorena complementa: “Un líder desarrolla habilidades intelectuales, inteligencia emocional, sobre todo, pero no deja de ser una persona, que siente, piensa y en algún momento puede tener una debilidad y hasta miedo”.
Muchas veces puede pensarse que una persona que lidera, llegó a ese lugar porque es un experto en todo. Ahora bien, hay que analizar si esa omnipotencia que se cree tienen los líderes, es realmente un rasgo distintivo positivo y siendo más incisivos aún, ¿existe tal cosa como el líder omnipotente?
“Nadie puede saber todo, pero es importante que el líder logre comunicarse con quienes están ejecutando las acciones en el día a día. Un CEO no necesita saber hacer un código, pero tiene que tener claro cuál es el mejor lenguaje que hay que utilizar, porque eso tendrá un impacto directo en el producto o servicio a ofrecer. Por ejemplo, si se trata de hacer una aplicación para iOS o Android, el CEO debe marcar la pauta de para que se desarrollará, como va a ayudar a su negocio y luego debe contratar o se le darán las directivas al especialista para que ejecute”, contesta Fabiany Lima, quien ha oficiado de jueza en competencias de Startups¸ a nivel nacional e internacional.
Lorena Almaraz, siendo una mujer disruptiva, como ella misma se presenta, elige también su respuesta: “Yo creo que el liderazgo va de estar inmerso en todo, escuchar, ver, participar, dirigir la toma de decisiones y a su vez permitir que otros sean parte. Es necesario estar dentro del contexto, de lo que ocurre día a día, sea un equipo de trabajo, emprendimiento o empresa. Pero hay que diferenciar entre estar inmerso y hacer que todo dependa de uno, ya que un líder debe ser capaz de delegar, de confiar en su equipo, guiar y orientar, mostrar el camino en definitiva”.
Un líder no tiene que saber de todo, no sería prudente que absolutamente todo pase por una persona, aunque la palabra final, eso si será potestad de la persona que asuma la autoridad de un proyecto o emprendimiento. Lo explica la líder emprendedora de Brasil, hoy en Puerto Rico: “Si hablamos de tomar decisiones finales, siempre debe haber una persona definida. Si bien puede haber muchos líderes dentro de un emprendimiento o empresa, para tomar decisiones en distintas áreas, como puede ser un CTO por ejemplo, siempre será necesario que alguien tenga la palabra final”.
Como mencionó Lorena Almaraz en un pasaje de este artículo, es normal que a la figura del líder se le achaquen distintos rasgos que pueden o no, tener que ver con lo que en realidad importa, que es la capacidad que tendrá esa persona para llevar a buen puerto un proyecto, sea cual sea el rubro o las características particulares del mismo.
Es así, que, cerrando su participación, Fabiany Lima enfoca sobre una de los rasgos importantes en la figura de un líder, como lo es la edad: “No creo que la edad influya en la creación de la figura de un líder. Pienso que va más por un conjunto de conocimientos, de actitud. Hay muchos jóvenes que tienen la iniciativa de prepararse y convertirse en líderes. Aunque, como ya dije, no será algo inmediato y seguramente con el correr de los años perfeccione su posición”.
Lorena Almaraz, habla de superación, para dejar atrás esos condicionantes que uno mismo puede colocarse: “En ocasiones hay personas que se limitan a desarrollar su liderazgo o no se consideran como lideres, quizás porque ven una imagen de líder mucho más carismático que ellos, que habla mejor, que es más resolutivo. Se puede creer que no es posible alcanzar eso, sin embargo, en lugar de verlos como un imposible, se puede tomar como aprendizaje, al reconocer eso que nos falta y trabajarlo”. Finalmente, comparte la última reflexión: “De todos modos, convertirse en líder es también atravesar un proceso de prueba y error, porque uno se equivoca y de ello debe aprender para crecer como referente”.
desde México 
desde Puerto Rico 
