Muchas veces de las preguntas más básicas surgen las respuestas más útiles. Esto se debe a que generalmente los temas que creemos más conocidos o que involucran a más cantidad de personas son sobre los que menos reflexionamos. Por eso, cuando nos detenemos a observar y dominamos eso que es tan cotidiano, terminamos obteniendo mejores resultados.
Exactamente eso pasa con las finanzas personales. El manejo de la economía diaria puede parecer algo sencillo y controlado por todos, aunque por el contrario resultan ser una minoría quienes aplican las mejores estrategias y tienen bien en claro de qué se trata.
Entonces, con el objetivo de ampliar ese selecto grupo retomamos el interrogante, ¿por qué son importantes? El asesor de finanzas e inversiones Juan Carlos Garreta, así lo explica: “Las finanzas personales son algo fundamental porque me permiten gestionar todo lo que tiene que ver con el dinero a través del tiempo, a través de todo el momento de mi vida. Nos vemos envueltos en un mundo muy consumista con una mentalidad a corto plazo orientada al placer inmediato, eso hace que de repente la gente inicie un tipo de gestión de su dinero en la que no solo gastan lo de hoy sino también lo de mañana”.
Para el corredor de bolsa costarricense, entonces, se trata de una cuestión de calidad de vida: “La importancia está en ordenarse para esa persona que seremos mañana, no solo pensando en la seguridad financiera sino en la libertad, sin dudas es una de las áreas clave que tiene que ver con la calidad de vida”, asegura.
Dentro de la reflexión acerca de la importancia de un buen manejo de las finanzas personales, hallamos un enfoque especialmente interesante para los emprendedores. En este sentido, José Manuel Campos Esquinca, contador público y especialista en finanzas personales, afirma: “Las finanzas personales son la piedra angular para poder determinar el potencial que tenemos como personas financieramente hablando, si nosotros no sabemos cuánto entra y cuánto sale no vamos a poder desarrollar ningún proyecto”.
Con absoluta coherencia, el asesor mexicano remarca la viabilidad de un proyecto a largo plazo sustentada en gran parte gracias a la previsibilidad y el orden económico, por lo que se torna inadmisible para cualquier emprendedor no intentar dominar esta área específica.
Si bien no hay un solo libro o teoría que determine una serie de lineamientos absolutos o infalibles, sí se pueden establecer ciertas líneas o herramientas útiles para tenerlas bajo control.
Con respecto a esto, Campos Esquinca enumera tres etapas o pasos de la organización individual que podrían convertirse en el gran paso para alcanzar, según sus palabras, “unas finanzas sanas”.
“En primer lugar”, comienza enumerando, “debes armar tu presupuesto, saber cuánto ingresas y cómo puedes desarrollar otras actividades que te generen más. Al mismo tiempo, como segundo paso, tienes que catalogar tus gastos para que con esa base puedas elevar tu presupuesto mientras piensas cómo puedes gastar un poco menos. Por último, debes cumplirlo, es absolutamente lógico pero no menos importante, tienes que apegarte a ese presupuesto que has elaborado”, finaliza.
Según Campos Esquinca, estas tres instancias simples e iniciales, serán la puerta de entrada a unas finanzas sanas, entendidas como “tener la libertad de elegir cuándo gastar y cuándo no”.
Hacer coincidir la dinámica de la vida diaria con lo escrito y planificado en una hoja o archivo de computadora, puede parecer imposible. Sin embargo, existe la posibilidad de acercarse bastante.
“Siempre habrá imprevistos, si tú los consideras en tu presupuesto eso estará controlado”, explica Campos Esquinca, y continúa: “En tu presupuesto debes ampliar la parte de los gastos, incluyendo cuánto necesitas para desarrollar tu actividad y cuánto necesitas para vivir, por ejemplo, sumando también lo que gastas en entretenimiento y salidas. Debes tener un fondo de emergencia que irá creciendo con una parte que separes de cada ingreso, lo que generará que ante imprevistos tengas a donde recurrir y no afecte tu organización financiera”.
Un buen manejo de las finanzas personales, como puede suponerse, también tiene que ver con una vida ordenada en cuanto a valores y prioridades, más allá del dinero. Si se manejan una serie de principios que denotan un razonamiento inteligente para desarrollarse, será muy probable que puedan controlarse los números de una mejor manera.
Con respecto a esto, Garreta plantea una serie de comportamientos que considera fundamentales: “El primero es llevar un nivel de vida por debajo de las posibilidades, poder llegar y tener un flujo permanente, vivir con 60% o 70% de lo que genero con el fin de dedicar el resto a otros asuntos como, por ejemplo, los patrimoniales”, exclama.
“El segundo”, continúa, “tiene que ver con conocerse uno mismo desde el punto de vista emocional. Por más presupuesto que haga, si no se conoce, si no conoce sus sentimientos y no sabe cuál es su reacción cuando hablan de dinero será difícil. Conocerse a uno mismo es importante para saber cómo gestionar ese día a día con respecto a esas decisiones que implican una transacción de dinero, no solo ahora, sino también en el futuro”.
En tercer lugar, Garreta destaca la importancia de minimizar el impacto de la deuda: “Nos han educado en la posibilidad de adquirir bienes pagándolos a cuenta durante meses o incluso años, y uno cree que puede sostenerlo aunque no siempre es así, ya que no medimos el plazo y el costo de la deuda. Es importante intentar nunca incurrir en deuda si fuera posible, o por lo menos gestionarla adecuadamente para que el costo en nuestra vida no sea muy alto”, advierte.
Uno de los desafíos más grandes y difíciles de lograr, es comprender y aplicar exitosamente la relación y coexistencia de las finanzas personales y el emprendimiento. Pensarlos como dos ejes absolutamente separados o completamente juntos, no es la solución ni el mejor enfoque que puede elegirse.
En este sentido, los especialistas tienen opiniones bien formadas al respecto y arrojan considerable luz sobre esta temática. Garreta, por su parte, puntualiza en la separación: “Se cree que las finanzas personales son el emprendimiento y hay que entender que la separación es importante porque lo que está en el emprendimiento es capital de riesgo”, aclara con atención. Seguidamente, desarrolla: “Uno cuando es emprendedor en alguna medida tiene que verse como un empleado, pagarse cierta cantidad y aplicar sobre eso todas las reglas de las finanzas personales. En el momento que eso levante, uno puede mejorar y pagarse algún tipo de excedente, bonificación o remuneración para fortalecer sus finanzas personales”.
Por otro lado, Campos Esquinca elabora su reflexión encontrando los puntos en común entre ambos espacios: “El negocio es lo que te da el ingreso para esas finanzas personales y a su vez si tu entorno personal está sano podrás organizar mejor tu entorno de negocios, eso quiere decir que no se desvinculan”, explica, y concluye: “Tener unas finanzas sanas en lo personal te permite tener una preocupación menos en la que enfocarte cuando estas con un negocio, y el éxito de ese negocio te permitirá tener un mejor nivel de vida”.
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