Con dieciséis años de experiencia en el mercado, Enmedio Comunicación Digital es hoy en día un gigante y referente de la Digital Signage en Colombia. Actualmente, opera cerca de 6.000 pantallas en casi 2.000 locaciones distintas, en 6 países diferentes y continúa expandiéndose. Detrás de todo esto, por supuesto, hay personas que alguna vez soñaron con alcanzarlo.
Sebastián Obregón es el CEO y Co-fundador de la compañía, la cual creó con sus socios Daniel Peláez y Sebastián Molina en el 2006, y si bien hoy vemos en él un gran empresario, su esencia fue y sigue siendo la de un apasionado emprendedor.
“Afortunadamente tuve desde temprano muy en claro lo que quería”, comienza asegurando Obregón con certeza, previo a develar el más sincero origen de su propósito: “Cuando era chiquito les decía a mis papas que quería ser inventor, siempre me gustó crear de la nada, y lo que los emprendedores hacemos es una idea y hacerla realidad. De cierta manera no terminé siendo inventor pero desarrollé negocios de cero y eso siempre me ha gustado”.
Con esa determinación entre ceja y ceja, Obregón creció en su ciudad natal, Medellín, en donde también estudió Administración de Empresas en la Universidad EAFIT. En esa etapa fue que comenzó con sus primeros negocios con amigos: ventas de frutas y flores en plazas y mayoristas, venta de calculadoras y celulares, realización de eventos y demás. “Éramos muy inquietos”, según sus propias palabras.
Hacia el final de su período universitario, Obregón lanzó junto a sus socios un particular negocio que, aunque no lo sabían, se convertiría en el extraño pero contundente punta pie inicial de un próspero futuro. “La idea consistía en máquinas dispensadoras de cepillos de dientes desechables con crema, las colocábamos en baños de bares y restaurantes, allí el cliente ponía una moneda y salía un cepillo con el que podía lavarse los dientes”, cuenta el actual CEO de Enmedio.
“Cuando pensamos como hacerlo se nos ocurrió China”, continúa Obgregón, “buscamos un proveedor en internet que nos vendiera todo lo que necesitábamos y montamos el negocio, aprendiendo mucho en el camino”. China, ahí está la clave.
Mientras desarrollaba su negocio y buscaba crecer un poco más cada día, Obregón comenzó a entusiasmarse con la idea de viajar a China en busca de inspiración y buenas oportunidades. Aunque no fuera algo común en aquella época, el gigante oriental comenzaba a ser la potencia tecnológica que todos conocemos y su intuición le indicaba que debía dar ese paso, por lo que convenció a sus socios y emprendió el viaje.
“Nos graduamos y nos fuimos a vivir a Shangai por siete meses. Por las mañanas estudiábamos mandarín y por las tardes íbamos a ferias, congresos, visitábamos fábricas y buscábamos oportunidades de negocios. No teníamos algo especial en mente, estábamos abiertos a lo que fuera”, recuerda con nostalgia.
Una vez en China, los tres colombianos recorrieron y anduvieron incansablemente, sin demasiada claridad. Sin embargo, lo que buscaban estaba más cerca de lo que pensaban. Así lo relata Obregón: “La idea del negocio siempre la tuvimos en las narices, pero a pesar de eso seguíamos buscando en ferias, evento y demás. Un día en la Feria de Cantón vimos en un stand unas pantallas y nos dimos cuenta que eran igualitas a la que teníamos en el ascensor del edificio donde vivíamos, por donde todos los días veíamos como pasaban publicidades. Ahí se nos prendió la bombilla”.
Tras este descubrimiento, comenzaron a investigar sobre el negocio: “Nos pusimos a investigar sobre el Digital Signage y descubrimos que era un nuevo medio de comunicación basado en las pantallas digitales que se podían instalar en sitios públicos o privados, las mismas se podían operar remotamente a través de internet y así poner todo tipo de contenidos direccionados a diferentes audiencias”, explica detalladamente Obregón.
Con la idea y los conocimientos a cuestas, entendiendo la proyección del negocio que acababan de descubrir y luego de generar algunos contactos, volvieron a Colombia luego de siete meses para dar vida a Enmedio.
Al regresar a su país, Obregón y sus socios debían convencer a sus clientes de que traían una innovadora y maravillosa idea. De esta manera, comenzaron a instalar las pantallas al lado de las máquinas dispensadoras de cepillos de dientes e iniciaron así el negocio de la publicidad.
“Nos empezó a ir bien”, cuenta Obregón, “conseguimos clientes rápidamente y trajimos más pantallas. En los primeros tres o cuatro años teníamos más de 300 pantallas ubicadas en bares, restaurantes, oficinas, centros comerciales, supermercados y nos dimos cuenta que el negocio no era solamente de publicidad sino también de contenido. Así nació la línea Enmedio Institucional, en donde ofrecíamos un servicio integral que incluía la pantalla, el computador, el software, la producción del contenido y su programación”.
Allí el negocio se disparó, ya que en sus propias palabras “fue como montarle a las empresas canales de televisión propios para comunicación interna a los empleados o externa para sus clientes”.
Hoy en día Enmedio abarca todos los frentes, el de la publicidad y el de la señalización digital como tal, y se ha convertido en una de las líderes de la industria MarTech en Colombia con real proyección continental e impactando a 80 millones de personas todos los meses.
Alcanzar los objetivos más deseados no es una meta sencilla para nadie. De hecho, muchos jamás lo logran. Por eso, Obregón le da la importancia que merece y, aunque quiere llegar mucho más lejos, siente con gratificación que lo ha logrado y entiende la responsabilidad en ellos.
“Me apasiona todo lo que implica ser un empresario, creo que es algo que genera impacto”, explica, y desarrolla: “obviamente que quiero llegar más lejos y tener más empresas, pero de cierta manera sí cumplí el suelo de ser empresario y todo lo que eso significa. Uno desde ese lugar tiene la responsabilidad de devolverle a la sociedad generando empleo, que es lo que hacemos, yo además soy inversionista de negocios de emprendedores y mentor, es algo que realmente me gusta y llevo en mí”.
El camino de Enmedio pasó por muchas etapas, partiendo desde la innovación absoluta hasta convertirse en un referente. En el medio, claro, muchos desafíos. “Cuando lanzamos la idea, era algo que nadie nunca había hecho y eso nos ayudó mucho, fue muy innovador”, comenta Obregón, y aclara: “Sin embargo, al mismo tiempo teníamos muchas dudas porque los anunciantes de publicidad no estaban acostumbrados a hacerlo en medios alternativos, solo les interesaba la televisión, la radio y la prensa”.
Luego de su primer año, llegó un nuevo desafío: “En 2007 llegaron los Smartphone y eso nos asustó un poco, ya que todo el mundo pasó a tener una pantalla en la mano y nació la publicidad uno a uno, sin embargo, seguimos creciendo”, evoca con orgullo el medellinense.
“Realmente es un honor que nos hayan reconocido como empresa líder del Marketing Tech, sobre todo porque sí fuimos de los pioneros en eso. Hoy hay mucha tecnología, aplicaciones y plataformas, pero cuando empezamos hace 16 años lo que hacíamos era realmente tecnológico. Nosotros fuimos la primera empresa que incorporó sistemas de inteligencia artificial y medición por reconocimiento facial, por ejemplo. Nos reconforta mucho que se reconozca que innovamos en el mercado y en el mundo de las comunicaciones”, reflexiona agradecido Obregón.
Actualmente Enmedio tiene operación directa en Colombia, México y Ecuador, aunque a su vez opera pantallas también en Panamá, Perú y Chile. Además de su desembarco en otros países, muchos de sus poderosos clientes con tiendas o sucursales internacionales los han llevado a cruzar varias fronteras.
Sobre esto, Obregón analiza y proyecta: “Ha sido un reto porque que te vaya bien en tu país no significa que te irá bien en el otro, sin embargo, a nosotros nos ha ido bien. En México, por ejemplo, estamos creciendo mucho, y personalmente apunto a generar algo aún más grande que lo que tenemos en Colombia. Nuestra visión es abrir más operaciones en la región y expandirnos a nivel Latinoamérica”.
La compañía ya cuenta con más de 15 años de trayectoria, pero su CEO sigue viendo oportunidades de crecimiento y proyecta convertirla en una empresa todavía más grande y valiosa. Aunque la pandemia trajo consigo sus complicaciones, Obregón observa una transformación que le resulta positiva: “Puede que muchos sitios físicos vayan a cerrar, pero aquellos que permanezcan querrán ser más digitales y ofrecerles mejores experiencias a sus clientes. Veo un mundo físico y digital a la vez, por eso, creo que hay mucho potencial en lo que hacemos y la idea es seguir aprovechándolo”, augura Obregón.
“Empezamos muy fuerte y estamos trascendiendo a muchas industrias como la automotriz, restaurantes de comida rápida, industrias de la educación, el mundo de la salud, entretenimiento, casinos, museos, la industria corporativa, y hay muchas industrias que todavía no han entrado y nos requerirán, aquí estamos para acompañarlas y ayudarlas a digitalizar sus espacios. Apuntamos a tener miles de pantallas más en el futuro”, concluye.
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