En noviembe del 2022 la tecnología dio un nuevo paso, un avance concreto en cuanto al desarrollo y la automatización de procesos. A través de ChatGPT, la compañía norteamericana OpenAI presentó ante la sociedad una oportunidad para que todas las personas con dispositivos conectados a una red de internet puedan acceder a un bot que les resuelve con Inteligencia Artificial muchas de las tareas con las que se lidia en un día de trabajo normal.
Con casi un año de existencia, la efervesencia de su lanzamiento disminuyendo, la réplica de sus funciones realizadas por otras compañías son cada vez más y el ChatGPT entonces comienza a ser analizado en profundidad como la referencia en material de IA en el trabajo.
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En esta oportunidad, varios estudios realizados en importantes universidades del mundo empiezan a mostrar algunos índices sobre la ingerencia que tiene la utilización de la tecnología de IA, en particular el ChatGPT, Midjourney, Google Bard, entre otros, en un ámbito laboral y en relación a la expectativa que se planteaba sobre su capacidad para mejorar o disminuir el rendimiento y la productividad de las personas, así como el potencial peligro respecto a la pérdida o desplazamiento de los humanos ante la automatización de determinadas tareas.
Académicos de la Universidad de Washington en St. Louis, realizaron un estudio acerca de cómo la IA generativa, es decir los bots de inteligencia artificial que resuelven tareas a pedido y pueden llegar a generar desde respuestas preestablecidas a textos, imágenes, videos, audios e incluso presentaciones completas, ya ocupa puestos de trabajo administrativos y de gestión, conocidos en Estados Unidos como white collar jobs.
¿Esto significa que hay personas perdiendo sus empleos? no es necesariamente así, pero quienes llevaron adelante la investigación, enfocándose puntualmente en ChatGPT, revelaron que si corren cierto peligro los empleos llevados a cabo por profesionales autónomos en proyectos de corta o media duración, al igual que ha habido una reducción en las remuneraciones, sobre todo en aquellos que tienen profesiones creativas, como pueden ser los diseñadores gráficos o redactores.
Sin embargo, en contraposición, se explica que cuando la IA se aplica en función de potenciar el trabajo de un profesional humano, los resultados pueden ser superiores. Es decir, que en lugar de reemplazar a la persona, la tecnología sería un aditivo o un plus. Además, a medida que las tareas se vuelven más complejas la intervención humana continúa siendo de vital importancia.
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Otra universidad de prestigio que reveló los resultados de sus estudios más recientes en virtud del impacto de la tecnología de IA fue la Harvard Business School, desde donde se realizó un monitoreo de dos grupos de empleados, uno que tuvo acceso y decidió utilizar la versión de ChatGPT-4 y otro que, en las mismas tareas, no pudo contar con la novedosa herramienta.
¿Qué sucedió? Bueno, el grupo de trabajadores que tuvo acceso y utilizó las funciones automáticas, así como las facilidades que brinca ChatGPT-4, terminó resultando más productivo. Se comprobó que concretaron sus tareas un 25% más rápido y consiguieron llevar a cabo un 12% más de tareas en general, con un aumento en la calidad final también, considerándose un 40% mejor.
Lo que todos los catedráticos e intelectuales se preguntan, en consonancia con los ingenieros y mentes más importantes que están detrás de las principales Apps que funcionan con IA, es si esta tecnología será un beneficio o, en el largo plazo, un gran problema para la sociedad a escala global.
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¿Será que el humano logrará resolver todas sus necesidades primarias con un coste casi nulo, sin esfuerzo y delegando todo en un sistema inteligente? "Es cada vez más frecuente que salgan gurus nuevos a mencionar que no hay de que preocuparse y que la IA resolverá todos nuestros problemas, pero lamentablemente es propaganda de grandes compañías que muchos se tragan", expresó Daron Acemoglu, catedrático de economía del MIT (Massachusetts Institute of Technology).
"Si se toman las decisiones adecuadas, puede ser extremadamente útil pero hay que mantenerse atentos a la dirección que toma. De lo contrario, fallaremos y no habrá prosperidad compartida para todos", sentenció Acemoglu.
