Desafiar lo convencional y salir del confort

Vivimos en una sociedad regida por normas económicas y sociales que se vienen arrastrando desde hace años. Como emprendedores, el desafío pasa por actuar distinto frente a eso y rediseñar el modelo de negocio. Y en esa dirección, emprender de manera sostenible no solo es un beneficio para el planeta, sino un camino hacia el éxito.

Ser sustentable implica desarrollar la creatividad, porque requiere de incorporar nuevas formas de producir, consumir e innovarnos en cada acción. Implica un desafío constante a partir de incorporar valores sociales y ambientales en nuestras decisiones.

Este nuevo desafío en la forma de emprender está llegando para cambiar nuestra economía. Porque el beneficio no es únicamente para el mundo y el resto de la sociedad, sino también para el propio negocio. Se trata de gestionar de una mirada consciente y empática con la realidad medioambiental que estamos viviendo.

Incluso es el propio consumidor quien está exigiendo un carácter más sustentable a la hora de preferir una marca sobre otra. Por lo tanto, en vistas de las ventas es cada vez más necesario que un emprendimiento sea más responsable con el medio ambiente.

Cómo convertirse en un emprendedor sustentable

Para ser un emprendedor sustentable, como primera medida hay que estar dispuesto a replantear la forma en que se han presentado las empresas hasta ahora. Lo que a su vez implica modificar esas leyes no escritas y establecer otras que tengan en cuenta el cuidado ambiental y social. Es un aprendizaje constante, que atraviesa a cada área del emprendimiento.

Después, es necesario ser coherentes en cada acción que llevemos a cabo. Tanto en las acciones visibles para con los clientes, como de manera interna teniendo en cuenta un sistema acorde con nuestros ideales, trasladándolo hacia los proveedores, equipo de trabajo, vecinos y organizaciones.

Acciones a implementar para hacer una empresa más sostenible

Al margen de las ideas, convertir una empresa en sostenible requiere de acciones concretas. Cuestiones que van desde la comunicación hasta la producción misma y que abarcan a todos aquellos que forman parte del emprendimiento.

Como decíamos, uno de los puntos tiene que ver con la comunicación. A partir de la transmisión de valores, datos e información de la realidad medioambiental, para así impulsar a que haya más consumidores responsables y personas conscientes.

Otra acción fundamental es repensar, dentro de la empresa o emprendimiento, cuál es el material de descarte que se genera. Para, a partir de ahí, buscar cómo se puede convertir en recurso dentro de nuestro emprendimiento. O aliados que puedan reinsertarlo en su cadena de valor.

Este caso es muy importante porque se produce el doble beneficio del que hablamos al comienzo. Una contribución al medio ambiente pero también un potenciador para el emprendimiento. Puesto que, de un material de descarte, como por ejemplo plásticos, telas o papeles, se obtiene algo útil. Se produce un mejor aprovechamiento y gestión de los recursos.

Ejemplos de emprendimientos sustentables

Uno de los ejemplos más claros de emprendimiento sustentable es la construcción de productos derivados del reciclaje. Para el 2025, de acuerdo con el Banco Mundial, se espera que la cantidad de basura que se produce en la tierra alcance los 3.400 millones de toneladas. Por lo tanto, impulsar un negocio en base a la cultura del reciclaje es un gran ejemplo de sustentabilidad.

También podemos mencionar el aprovechamiento de alimentos desperdiciados. Si aprendes sobre la deshidratación de los alimentos, puedes iniciar un emprendimiento en donde ayudes a los demás a conservar sus comidas y alimentos de manera más sana.

Un ejemplo de negocio sustentable con gran potencial es una tienda propia de frutas, verduras y productos orgánicos. O incluso un restaurante de comida orgánica, o un café orgánico. Enseñar en cursos cómo cultivar alimentos en casa puede ser otra vertiente dentro de este modelo de emprendimiento.

La sociedad es cada vez más consciente de la necesidad del cuidado medioambiental, por lo que desarrollar un emprendimiento sustentable es sin dudas un gran modelo de negocio. El cliente elige cada vez más en esa dirección.